Cuando menos nos lo esperábamos, los casi desaparecidos Lytro van y se presentan con una nueva cámara que podría revolucionar la industria cinematográfica.
Lytro es una empresa famosa por sus peculiares cámaras fotográficas, permiten al usuario enfocar después de tomar la fotografía. Lamentable para la compañía, esta idea no ha encontrado su nicho de mercado seguramente debido a que los usuarios cada vez compran menos cámaras, y los que compran buscan opciones con mayor manualidad. Propuestas como las de Lytro se han presentado en el mundo de los smartphone, aunque de forma conceptual, gracias a lo que llamamos Array de cámaras, una agrupación de sensores sobre el dispositivo que permiten al usuario enfocar a posteriori o conseguir lentes grupales más luminosas (conceptualmente).
Hoy la empresa presenta su nuevo modelo de cámara, esta vez mucho más centrada en un ámbito, uno que además no tiene muchas restricciones presupuestarias, como es el del cine. La cámara de vídeo que han presentado permite almacenar cada fragmento de información que la luz nos proporciona, una información que en su conjunto supone poder separar cada objeto tridimensional por separado.
Para un cineasta esto significa tener una enorme libertad en la fase de post-producción, sin preocuparse tanto por la perfección en cada plano. Tras la grabación se podría reencuadrar la imagen, buscar un nuevo enfoque, cambiar la apertura de la imagen e incluso el tiempo de obturación de la imagen.
Esta nueva tecnología también posibilita la creación de nuevo contenido para VR (Realidad Virtual) que hasta el momento solo podría concebirse en nuestra imaginación.
Bautizada como Litro Cinema, la espectacular cámara es capaz de realizar capturas a 300 fotogramas por segundo (300 fps) en resolución 40K (no, no me he equivocado). El resultado de tal tremenda captura son 400 Gigabytes por segundo de grabación. El resultado pretende unir el CGI con el mundo real de la forma más sencilla posible. La tecnología permite incluso grabar escenas con Chroma Key sin la necesidad de esa molesta pantalla verde, ya que seremos capaces de separar los objetos y personajes dependiendo del plano focal sobre el que estén situados, como muestra el vídeo que tenemos a continuación.
Para poder tratar con tal cantidad de datos, Lytro pondrá a disposición de los compradores también un paquete de software que facilite el tratamiento de todas las imágenes, y el paquete básico parte de los 125.000 dólares, una cantidad que si bien puede parecer desorbitada en un principio, se debe contemplar el importante ahorro de costes durante la grabación y la flexibilidad que ofrece tras la toma.
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