El mercado de los teléfonos inteligentes está totalmente copado, hay modelos de todas las clases, colores y precios, y este terminal finalmente no supondrá un diferencial. Por sus características de modularidad será más grueso y pesado que la competencia, pero ofrece únicamente algunas mejoras para diferentes nichos de mercados. La idea de construirte tu terminal como si de LEGO se tratara es muy interesante, pero el público no sabe lo que quiere, y ampliar el número de opciones dificulta su elección.
El éxito de los flagship consiste en traer lo mejor posible en todos los apartados de un terminal, tanto internamente como externamente. En este dispositivo tendrás que seleccionar las funcionalidades de mayor valor para ti, y posteriormente buscar en el mercado qué fabricante lo incorpora en una de estas piezas magnéticas. Demasiadas variables.
Desde mi punto de vista, el teléfono es perfecto para ciertos nichos de mercado siempre y cuando las piezas acompañen. Si consiguen grandes fabricantes, por ejemplo, de fotografía, hacerte tu propio dispositivo con un gran sensor con lente, batería extra y linterna/flash, puede llegar a resultar útil como cámara en viaje.